Cada Virreinato y cada capitanía general, se dividía en provincias a cuyo frente se hallaba un Gobernador . Eran designados por el rey, aunque las Audiencias y los virreyes los nombraban en ciertas circunstancias.
En el Río de La Plata, los gobernadores sucedieron a los adelantados - sin los privilegios de estos - y de acuerdo con la Real Cédula de 1537, fueron a veces elegidos mediante el voto de los vecinos por simple mayoría.
Los gobernadores tuvieron un desempeño importante durante el periodo hispánico hasta el año 1782 en que por Real Cédula se implantaron las Intendencias, recibiendo los nuevos mandatarios el titulo de Gobernadores intendentes.
Los gobernadores gozaban de amplias facultades civiles, políticas y judiciales dentro del territorio, a veces de limites imprecisos, que tenían asignado.
- Podían dictar y ejecutar ordenanzas de gobierno.
- Presidian el Cabildo de las ciudades donde residían.
- Mandaban las tropas de sus distritos.
- Vigilaban el cumplimiento de las disposiciones reales respecto de indios y encomiendas.
- Supervisaban la labor de los cabildos, tanto en lo referente a abastecimientos, aseo y limpieza de la ciudad como a la administración de la justicia.
Generalmente duraban tres años en sus funciones.
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